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El poder llevar un estilo de vida saludable es de suma importancia, ya que a la larga te ayudará a gozar de una mejor longevidad, y así mismo mantener una buena calidad de vida. Sentirte mejor físicamente y tomar el control de tu vida también mejora en gran medida tu salud mental.
Ciertos aspectos de la salud física y mental están más allá del control de un individuo. Sin embargo, hay muchas cosas que las personas pueden hacer para mejorar su calidad de vida y gozar una vida plenamente satisfactoria.
Hay muchas maneras en que puedes mejorar tu calidad de vida. Esto se logra teniendo una dieta saludable, que incluya el consumo de frutas y verduras, realizar un programa de ejercicios regular, evitar el consumo de sustancias tóxicas para el cuerpo tales como el cigarro y el alcohol.
En esta página te brindaré de manera exacta y de fácil lectura la información sobre los puntos básicos para desarrollar tus propios hábitos de una vida equilibrada y saludable.
Lo primero que debes hacer es enfocarte en un estilo sano de alimentación. Tu cuerpo necesita un buen plan nutricional para mantenerte saludable. Lo principal no está en perder peso, lo importante es consumir lo que funciona para tu cuerpo.
Beber más agua, así como comer más frutas y verduras es una forma de mejorar tu alimentación. El exceso de carne roja es perjudicial a largo plazo, pudiendo provocar a largo plazo enfermedades cardiovasculares y de algunos otros aparatos como el digestivo.
Incluye una variedad de alimentos que formen parte saludable de tu dieta. Proporciona a tu cuerpo la energía que necesita de los alimentos para mantenerte fuerte y saludable, come cantidades moderadas de pan o cereales.
Disminuye o evita el consumo de alimentos grasos como la mantequilla, la grasa o el aceite, así como la “comida chatarra”, las papas fritas y los dulces.
La actividad física regular también es necesaria para mantenerte saludable. La actividad física puede ayudarte en los siguientes aspectos:
Lo que te recomiendo es hacer al menos sesiones de 30 minutos de ejercicio tres veces por semana, pero cualquier cantidad de actividad física es mejor que llevar una vida totalmente sedentaria. La actividad física recomendada para tu cuerpo puede ser desde hacer una caminata rápida, un trabajo vigoroso en el jardín o andar en bicicleta.
Las drogas y el alcohol destruyen a una persona perfectamente sana. Debes evitar de manera estricta y tajante el consumo de drogas, así como limitar el consumo de alcohol al mínimo. Incluso el tabaco causa más problemas de salud que cualquier otra droga y es la más adictiva y la más utilizada.
Dejar de fumar tabaco puede salvar tu vida y te ahorrarás dinero, ¡créeme!.
El consumo excesivo de alcohol es absolutamente peligroso y te provocará un terrible daño hepático, un síndrome alcohólico, e incluso provocar terribles accidentes.
Otras drogas dañinas se incluyen la marihuana, cocaína, metanfetamina, heroína o analgésicos de venta libre.
Cuando conservas tu buen estado de ánimo, tomas mejores decisiones para ti mismo, sobre tu trabajo, tu estilo de vida y tu salud. Por lo tanto, para tener un cuerpo sano, una mente sana es muy necesaria.
Trata de evitar el estrés y dedícale tiempo de tu vida para que realices alguna actividad relajante lejos de lo rutinario. Es de suma importancia que dicha actividad relajante sea algo que disfrutes mucho al hacerla.
Busca ayuda profesional si te sientes deprimido o ansioso por varios días consecutivos, así podrás atender y evitar que ese problema se convierte en un malestar mayor que desencadene en un desequilibrio emocional mayor.
Además, asegúrate de dormir lo suficiente. Las personas privadas de sueño están destinadas a ser menos saludables porque la somnolencia reduce la concentración, aumenta los cambios de humor y provoca accidentes.
Cambiar a un estilo de vida saludable no es fácil, y no es cuestión de días. Esto puede llevar semanas o incluso meses. Sin embargo, puedes estar seguro de que los resultados serán satisfactorios.
Cuidar de un bebé recién nacido no es fácil. Los bebés necesitan cuidados y nutrición adecuados para evitar enfermarse y mantenerse saludables en todo momento.
Para ayudar a los padres, especialmente a las mamás, a cuidar a sus bebés, aquí encontrarás algunos consejos generales para el cuidado del bebé que debes conocer y seguir para mantener a tu bebé seguro, sano y saludable.
Las necesidades nutricionales de los bebés varían según la edad. Los bebés recién nacidos deben ser amamantados para recibir una nutrición adecuada y prevenir enfermedades a través de anticuerpos en la leche materna.
Pregúntales a otras mamás o a tu pediatra qué ropa debe usar tu bebé durante el día y la noche. Revisa la piel de tu bebé para ver si es alérgico a alguna prenda o tela en particular.
Ten mucho cuidado al cambiar el pañal de tu bebé. Al cambiar pañales, asegúrate de no jalar bruscamente sus pies y muévelo delicadamente de un lado a otro. Revisa los pañales de vez en cuando para ver si están sucios o necesitan cambiarse.
En climas fríos, es mejor agregar agua caliente a la tina, pero asegúrate de mezclarla bien. Para los bebés recién nacidos, asegúrate de bañarlos rápidamente pero con cuidado. Después de bañar a tu bebé, ten lista una toalla y cúbrelo.
Usa un jabón líquido recomendado por tu médico que sea hipoalergénico y suave para el cuerpo.
Los bebés necesitan mantenerse a salvo en todo momento de la suciedad, los contaminantes y los gérmenes que pueden entrar en sus cuerpos, así que asegúrate de desinfectarte las manos antes de sostenerlos.
Mecer a tu bebé mientras juegas con él no es aconsejable. Sacudirlo puede causar sangrado o daño cerebral, nunca sacudas a tu bebé. Cántale una canción de cuna o déjalo que escuche música mientras duerme.
Lleva siempre a tu bebé al pediatra o médico familiar para la aplicación de sus vacunas. Nunca te pierdas ningún calendario de vacunación, ya que las vacunas son muy importantes para proteger a tu bebé de ciertas enfermedades y así mantenerlo saludable.
No debes dejar a tu bebé descuidado por mucho tiempo. Los accidentes a menudo ocurren cuando el bebé se queda solo o cuando piensas que tu bebé solo está durmiendo mientras tú estás ocupada haciendo otras cosas.
Asegúrate de vigilar a tu bebé o pídele a tu niñera de confianza que lo vigile en todo momento.
Los bebés son frágiles y requieren extremo cuidado y atención. Los padres deben aprender a cuidar a sus hijos adecuadamente porque es su responsabilidad criarlos y mantenerlos sanos y seguros siempre.
Los productos de belleza inspiran a pensar que puedes encontrar soluciones mágicas en el frasco.
La realidad es que lo que realmente encontramos son químicos y toxinas que muchas veces dañan tu salud y apariencia.
Existe la manera de tener una belleza natural mientras tengas un
cuerpo saludable.
El cuerpo está compuesto por casi un 70 % de agua y necesita reponerse a lo largo del día. Por lo tanto, debes beber al menos de 6 a 8 vasos de agua todos los días.
Beber agua en lugar de refrescos o bebidas azucaradas es mejor para el cuerpo, los dientes y el cutis.
Además del agua, puedes agregar más alimentos ricos en agua a tu dieta. Consume frutas como la sandía, las uvas o el kiwi.
Estos alimentos te ayudarán a mantenerte hidratado, además obtendrás vitaminas, minerales, proteínas y otros nutrientes que tu cuerpo necesita para funcionar y lucir bien.
Algunas personas evitan las proteínas por temor a que aumenten de peso, pero las proteínas son esenciales para el crecimiento del cabello y tener uñas fuertes.
Consumir pan integral, carnes, verduras y frutas en tu dieta te mantendrá luciendo y sintiéndote lo mejor posible.
Si realmente quieres perder peso, intenta hacer algo de ejercicio. Incluso si ya eres delgado, un poco de actividad física hará que tu corazón se fortalezca.
Usa las escaleras en lugar del elevador, estaciónate lejos de los supermercados
para que camines lo más que puedas, planta en el jardín. Te sorprenderá
gratamente lo fácil que es quemar grasa y hacer que tu circulación sanguínea mejore.
Tu cuerpo necesita al menos 8 horas de sueño ininterrumpidas para recuperarse. Las siestas de unos 45 minutos durante el día son de gran ayuda para el óptimo mantenimiento de tu cuerpo.
Toma el descanso que necesitas y nunca verás esas bolsitas debajo de tus ojos. Además, tu cuerpo estará energizado y listo para el día.
Hay algunos conceptos erróneos sobre la dieta y la nutrición. En general, no me gusta el término dieta porque muchas personas lo asocian con una dieta específica por un tiempo y luego abandonan la dieta.
La nutrición, por otro lado, es algo que todos sabemos que es importante, pero parece una palabra crucial para tomar demasiado en serio.
Un cuerpo sano es como un coche bien afinado. No hay nada mejor que seguir una dieta equilibrada y un plan de nutrición para mantener tu cuerpo saludable.
Esto no tiene por qué ser restrictivo, solo necesitas seguir algunas pautas básicas.
El cuerpo necesita alimentos como combustible, un estilo de vida, ejercicio y una buena actitud mental para mantenerse equilibrado y así alcanzar su potencial saludable. Esto explica la relación entre salud, dieta y nutrición.
Usar el combustible incorrecto o renunciar al combustible correcto provocará que tu cuerpo no alcance su fuerza y rendimiento máximo. Nada es más importante que una dieta y nutrición adecuadas, porque sin ellas, los motores del cuerpo salpicarán, toserán y eventualmente se detendrán.
Sin embargo, siguiendo una dieta y una nutrición equilibradas, puedes beneficiarte de la siguiente manera:
Básicamente, se puede lograr una dieta y una nutrición adecuadas siguiendo las sencillas pautas que se describen a continuación. Una dieta equilibrada y un plan de nutrición incluye:
Casi todos los nutricionistas y expertos en salud están de acuerdo en que debes eliminar las grasas como la mantequilla, la crema, los alimentos fritos, los aceites y la margarina, siendo esta la mejor manera de perder peso y hacer que tu dieta y nutrición sean más efectivas y saludables.
También es especialmente importante para mantener tu corazón sano.
Muchas personas actualmente están preocupadas por controlar su peso, omitiendo así de su dieta el consumo de alimentos como el arroz, las papas, los cereales y el pan de calidad, los cuales son necesarios para mantener una salud óptima.
Los carbohidratos son importantes para la vitalidad y la energía, por lo que, si deseas energizar tu cuerpo, consume alimentos ricos en carbohidratos de alta calidad.
El consumo de fibra diariamente tiene gran importancia para la salud, ya que ayuda a tu cuerpo a mantenerse limpio y activo, ayuda a prevenir el cáncer de intestino, previene los cálculos biliares, ayuda a reducir el colesterol, además te ayuda a controlar tu peso.
Los panes de cereales y los cereales integrales son buenas fuentes de fibra.
Las frutas, verduras y cereales son ricas fuentes de vitaminas y minerales, además de otras sustancias naturales que actúan como antioxidantes.
Estos alimentos ayudan al cuerpo a combatir los radicales libres producidos por los alimentos de mala calidad y los contaminantes, los cuales pueden dañar las membranas y el núcleo celulares.
Comer alimentos variados te ayudará a obtener todos los nutrientes que tu cuerpo necesita. Trata de consumir comidas ricas en proteínas, carbohidratos, vitaminas y minerales, así tendrás la buena nutrición que tu cuerpo necesita.
Cada comida debe contener alimentos de los 3 grupos de estos macronutrientes.
El azúcar te ayuda a mantenerte activo y brindarte energía para hacer ejercicio; sin embargo, si se consume en exceso, te aporta calorías innecesarias a tu cuerpo, así como interferir en la absorción de otros alimentos importantes, especialmente en los niños.
El consumo excesivo de azúcar y dulces también puede provocar caries y otros problemas dentales.
Las dietas habituales y los planes de nutrición contienen sal. Si bien la mayoría de la gente piensa que la sal es un buen ingrediente saborizante para las comidas, en realidad enmascara el verdadero sabor de los alimentos que comes.
Muchos alimentos envasados y preparados contienen cantidades poco saludables de sodio, por lo que es importante comprar productos frescos.
Cuando compres alimentos envasados, busca etiquetas que no contengan sal o compra alimentos con bajo contenido de sodio. Otra opción es cambiar a la sal marina para la preparación de tus alimentos.
Se necesitan 2 litros u 8 vasos de agua para mantener el cuerpo hidratado, así como el buen funcionamiento de los riñones y otros órganos. ¡No te dejes engañar por los jugos, las bebidas energéticas o el alcohol!
Muchas de estas bebidas solo agregan calorías, las bebidas como el café y el alcohol en realidad pueden deshidratar el cuerpo. No se consideran líquidos útiles porque actúan como diuréticos, obligando a los riñones a expulsar más líquido.
El consumo de agua es tu única opción.
El ejercicio puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, aumentar los niveles de energía, mejorar el estado de ánimo y la confianza, mejorar la memoria, ayudar a dormir mejor y retardar el proceso de envejecimiento.
En la introducción de su libro Spark: The Revolutionary New Science of Exercise and the Brain, el Dr. Ratey comenta:
Todos sabemos que el ejercicio nos hace sentir mejor, pero la mayoría de nosotros no sabemos por qué. Suponemos que es porque estamos eliminando el estrés o reduciendo la tensión muscular o aumentando las endorfinas.
Pero la verdadera razón por la que nos sentimos tan bien cuando nos ejercitamos es porque mantiene el cerebro funcionando de la mejor manera y, en mi opinión, este beneficio de la actividad física es muy importante. El ejercicio cardiovascular tiene efectos secundarios benéficos para tu cuerpo.
A menudo les digo a mis pacientes que el propósito del ejercicio es desarrollar y tonificar el cerebro.
Una nueva investigación sugiere que el ejercicio puede mantener el cerebro en forma en la vejez y puede ayudar a prevenir la enfermedad de Alzheimer y otros trastornos psiquiátricos que acompañan al envejecimiento.
El Dr. Carl Cotman de la Universidad de California, ha descubierto un vínculo entre la actividad física y la capacidad mental. En un estudio publicado en la revista Nature, Cotman concluyó que los compuestos responsables de la salud del cerebro se pueden controlar a través del ejercicio.
Cotman ha estudiado roedores porque, dice, “el ejercicio afecta a los humanos y a los ratones casi por igual”. Las ratas que hacían ejercicio tenían niveles más altos de factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF), el factor de crecimiento más ampliamente distribuido en el cerebro y que se cree que disminuye con la aparición de la enfermedad de Alzheimer.
El ejercicio fortalece las conexiones entre las neuronas. Las regiones del cerebro estimuladas por el ejercicio están asociadas con la memoria y el aprendizaje. Cotman dijo:
Uno de los efectos más distintivos que a nivel cerebral provoca el ejercicio, es inducir una mayor tasa de aprendizaje, es decir, si estás en buena forma, tendrás mayor capacidad de aprender y actuar.
Un estudio alemán mostró que las personas aprendían el vocabulario un 20 % más rápido después del ejercicio que antes de realizarlo, y que la velocidad de aprendizaje estaba directamente relacionada con los niveles de BDNF (Factor neurotrófico derivado del cerebro).
El ejercicio es una de la mejor manera para levantar tu estado de ánimo. Cuando hagas ejercicio, tu cuerpo se sentirá más relajado y tranquilo.
Cuando haces ejercicio, tu cerebro libera endorfinas, adrenalina, serotonina y dopamina. Estos químicos trabajan juntos para hacerte sentir bien. Además, puedes sentir una sensación de logro después de un entrenamiento y tus músculos se relajarán más con el entrenamiento, aliviando la tensión.
“El ejercicio aeróbico de intensidad moderada provoca mejoras inmediatas en el estado de ánimo, y estas mejoras pueden persistir hasta por 12 horas“, concluyó el investigador principal del estudio, Jeremy Sibold, PhD, profesor asistente de rehabilitación y ciencias del ejercicio en la Universidad de Vermont, Burlington.
Los expertos coinciden en que una de las mejores formas de reducir el estrés es a través del ejercicio. Durante la respuesta al estrés, muchas reacciones químicas tienen lugar en el cuerpo en consecuencia para la llamada respuesta de “lucha o huida”.
El ejercicio puede ayudar a liberar emociones negativas como la preocupación, la irritabilidad, la depresión, la hostilidad, la ira, la depresión y la ansiedad.
El ejercicio regular brinda la oportunidad de controlar la respuesta de lucha o huida y ayuda al cuerpo a volver a la homeostasis o al equilibrio más rápidamente.
Investigadores de la Universidad de Duke publicaron un estudio en The New York Times que mostraba que el efecto producido por el ejercicio era superior a la sertralina en el tratamiento de la depresión.
Si el ejercicio existiera en forma de píldora, estaría en las primeras planas y sería aclamado como la droga más codiciada del siglo.
¿Sensación de cansancio? Caminar puede aumentar la energía y combatir la fatiga más que las siestas.
Una nueva investigación muestra que el ejercicio regular puede aumentar los niveles de energía incluso en personas con afecciones relacionadas con la fatiga crónica, como el cáncer y las enfermedades cardíacas.
Puede parecer contradictorio, pero los investigadores dicen que gastar energía a través del ejercicio regular puede ayudar a largo plazo mejorando la capacidad de tener energía.
“Muchas veces, cuando las personas están cansadas, lo último que quieren es hacer ejercicio”, dijo en un comunicado de prensa el investigador, el Dr. Patrick O’Connor. “Pero si está físicamente inactivo y cansado, un poco de ejercicio puede ayudar”, dijo O’Connor, codirector del Laboratorio de Psicología del Ejercicio de la Universidad de Georgia.
Los estudios han demostrado que el ejercicio regular puede aumentar la energía y reducir la fatiga, incluso desde adultos sanos hasta pacientes con cáncer y personas con enfermedades crónicas como diabetes y enfermedades cardiacas, se benefician del ejercicio.
Existe una relación directa entre la inactividad física y la muerte cardiovascular.
La inactividad física es uno de los principales factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares. La actividad física regular hace que tu corazón sea tan fuerte como cualquier otro músculo. Un corazón más fuerte puede bombear más sangre con menos esfuerzo.
El ejercicio regular también puede ayudar a disminuir la presión arterial, aumentar el colesterol HDL bueno (que transporta la grasa de las arterias de regreso al hígado para su procesamiento), reducir los niveles de colesterol LDL malo que puede formar depósitos de grasa en las arterias y prevenir la formación de coágulos de sangre y enfermedades cardiacas.
Las mujeres y los hombres que realizan actividad física al menos dos veces por semana tienen un 41 por ciento menos de riesgo de enfermedad coronaria que los que no realizan actividad física.
El ejercicio físico afecta beneficiosamente los niveles de colesterol en la sangre al reducir el colesterol malo (LDL), los triglicéridos y el colesterol total, así como aumentar el colesterol bueno (HDL).
El ejercicio en sí no quema el colesterol de la misma manera que quema la grasa. La actividad física puede alterar positivamente los procesos metabólicos del colesterol al aumentar la producción y la acción de varias enzimas en los músculos y el hígado que convierten parte del colesterol en formas más favorables, como el colesterol bueno (HDL).
La actividad física moderada combinada con la pérdida de peso y una dieta equilibrada pueden reducir el riesgo de desarrollar diabetes en un 50-60 % en personas que ya tienen un alto riesgo.
La actividad física regular mejora la resistencia a la insulina y la tolerancia a la glucosa y es muy eficaz para prevenir o retrasar la aparición de diabetes tipo 2 en personas con problemas de regulación del azúcar en sangre.
La manera en que el ejercicio puede reducir la presión arterial no está clara, pero todas las formas de ejercicio parecen ser eficaces para reducir la presión arterial. Por el contrario, la baja actividad física aumenta el riesgo de presión arterial alta.
El ejercicio regular puede reducir la presión arterial en personas obesas y con sobrepeso. El ejercicio aeróbico parece tener un efecto ligeramente mayor sobre la presión arterial en personas con presión alta que en personas sanas.
La evidencia sugiere que la actividad física puede estar asociada con un riesgo reducido de varios tipos de cáncer comunes, en particular el cáncer de colon y de mama.
Los datos de investigación sugieren que la actividad física moderada e intensa pueden reducir el riesgo de accidentes cerebrovasculares.
Las personas sanas después de los 40 años pueden tener un 50 por ciento menos de riesgo de accidente cerebrovascular en comparación con aquellas personas que padecen alguna enfermedad metabólica que limite su capacidad física.
Un estilo de vida activo es bueno para la densidad ósea. El ejercicio regular con pesas promueve la formación ósea, retrasa la pérdida ósea y previene la osteoporosis, una forma de pérdida ósea asociada con el envejecimiento.
El ejercicio moderado regular puede tener efectos beneficiosos sobre la función inmunológica. Los resultados de algunos estudios respaldan la posibilidad de que el ejercicio pueda retrasar la inmunosenescencia (la disminución de la función inmunológica asociada con la edad).
Si no duerme bien, el ejercicio diario puede marcar la diferencia. La investigación de la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford encontró que el ejercicio regular mejora la calidad general del sueño, se duerme más rápido, la duración del sueño es más prolongada y mejora la sensación de descanso por la mañana.
El ejercicio regular puede mantener o mejorar tu vida sexual. Las mejoras físicas en la fuerza y el tono muscular, la resistencia, la composición corporal y la función cardiovascular pueden mejorar la función sexual tanto en hombres como en mujeres.
Los hombres que hacen ejercicio regularmente tienen menos probabilidades de desarrollar disfunción eréctil e impotencia que los hombres que no hacen ejercicio.
El ejercicio regular puede ayudar a prevenir el dolor de espalda al aumentar la fuerza y resistencia muscular, mejorando la flexibilidad y la postura. Las Investigaciones serias han demostrado que el ejercicio es un tratamiento eficaz para el dolor lumbar recurrente.
El ejercicio es bueno para tu tracto gastrointestinal
El ejercicio es beneficioso para las personas con problemas de colitis y estreñimiento. La actividad física puede reducir el riesgo de diverticulosis, hemorragia gastrointestinal y enfermedad inflamatoria intestinal.
El ejercicio de alta intensidad reduce significativamente los cambios negativos asociados con la transición a la menopausia.
Si has decidido tener un bebé, lo más importante es que te preocupes de que tú y el bebé estén sanos en el futuro. Las embarazadas que tienen el cuidado adecuado y toman las decisiones correctas tienen muchas probabilidades de tener bebés sanos.
Debes conocer algunos aspectos importantes acerca del embarazo, a continuación te las monciono:
Si descubres que estás embarazada, consulta a tu médico lo antes posible para comenzar la atención prenatal (atención durante el embarazo). Cuanto antes comiences a recibir atención médica, mayores serán tus posibilidades de evitar complicaciones en tu embarazo y así tener un bebé sano.
Acude a tu ginecólogo de confianza o bien acude a tus servicios de salud que te corresponden para llevar un buen control de embarazo.
Durante la primera consulta, el médico te hará muchas preguntas, como la fecha de tu último período. De esta forma, podrás saber cuánto tiempo llevas de embarazo y la fecha en la que esperas a tu bebé.
Los médicos estiman la duración del embarazo en semanas. Las fechas de parto son estimaciones, pero la mayoría de los bebés nacen entre las 38 y 42 semanas después del primer día de tu último período menstrual, o entre las 36 y 38 semanas después de la concepción (cuando el espermatozoide fecunda un óvulo).
Solo un pequeño porcentaje de mujeres dan a luz en la fecha calculada del parto.
El embarazo se divide en tres etapas o trimestres. El primer trimestre va desde la concepción hasta el final de la semana 13. El segundo trimestre es de la semana 14 a la semana 26. El tercer trimestre es desde la semana 27 hasta el final del embarazo.
Tu médico te examinará y te realizará un examen pélvico. El médico también ordenará análisis de sangre, análisis de orina y pruebas para enfermedades de transmisión sexual (ETS), incluida la prueba del VIH, una enfermedad que es cada vez más común entre los adolescentes. (debido a que algunas ETS pueden causar problemas de salud graves en los recién nacidos, es importante recibir el tratamiento adecuado para proteger al bebé).
Tu médico te explicará los cambios físicos y emocionales que pueden ocurrir durante el embarazo. También te orientará para reconocer los síntomas de posibles problemas (complicaciones) durante el embarazo.
Esto es esencial porque las adolescentes tienen más probabilidades de desarrollar ciertas complicaciones, como anemia o presión arterial alta, y de dar a luz antes de la fecha prevista (parto prematuro).
Tu médico comenzará indicándote una vitamina prenatal que contiene ácido fólico, calcio y hierro. Estos minerales y vitaminas ayudan a garantizar la salud de los bebés y las madres, así como a prevenir ciertos defectos de nacimiento.
Lo ideal es que consultes a tu médico una vez al mes durante las primeras 28 semanas de embarazo. Luego debes visitar cada 2 semanas hasta la semana 36 y luego semanalmente hasta el parto.
Si tienes una condición médica, como diabetes, que requiere un control cuidadoso durante el embarazo, es posible que tu médico requiera verte con más frecuencia.
Durante la consulta, tu médico supervisará tu peso, presión arterial y orina, además de medir tu abdomen para llevar un registro del crecimiento de tu bebé. Si bien se pueden escuchar los latidos del corazón del bebé con un equipo especial, el médico lo escuchará en cada visita.
Tu médico también puede realizar otras pruebas durante el embarazo, como una ecografía, para asegurarse de que el bebé está en perfectas condiciones.
También forma parte de la atención prenatal, tomar clases donde las mujeres embarazadas aprendan cómo tener un embarazo y un parto saludables, así como los cuidados básicos de un recién nacido.
El trabajo de tu médico es ayudarte a disfrutar de un embarazo saludable y tener un bebé totalmente sano. No tengas miedo de preguntar a tu médico todo lo que necesitas saber.
Sea honesta cuando tu médico te haga preguntas, incluso si llegas a sentirte avergonzada.
Muchos de los problemas que tu médico quiere que le comentes pueden afectar la salud de tu bebé.
Piensa en tu médico no solo como un recurso, sino como un amigo en el que puedes confiar para hablar sobre lo que te sucede o lo que sientes.
El embarazo produce muchos cambios físicos. Aquí hay algunos de los más comunes:
Un aumento en el tamaño de los senos es uno de los primeros signos de embarazo y los senos pueden continuar creciendo durante el embarazo.
No te sorprendas si la gente comenta que tu piel se ve “brillante” cuando estás embarazada, el embarazo provoca un aumento en el volumen de sangre, lo que puede hacer que tus mejillas se vean más rosadas de lo normal.
Además, los cambios hormonales pueden aumentar la secreción de las glándulas sebáceas, haciendo que tu piel luzca más luminosa. Por la misma razón, el acné también es común durante el embarazo.
Otros cambios que las hormonas del embarazo producen en la piel incluyen manchas amarillas o marrones que aparecen en la cara, llamadas melasma, así como una raya oscura que va desde el ombligo hasta el hueso púbico, llamada línea alba o nigra.
Además, los lunares o las pecas antes del embarazo pueden volverse más grandes o más oscuros. Incluso la areola, el área alrededor del pezón, puede oscurecerse. Las estrías (líneas delgadas de color rosa o púrpura) también pueden aparecer en el abdomen, los senos o los muslos.
Además del oscurecimiento de la areola, que suele ser permanente, estos cambios en la piel desaparecen después del parto.
Es común experimentar cambios de humor durante el embarazo. Algunas mujeres pueden desarrollar depresión durante el embarazo o después del parto.
Si tienes síntomas de depresión, como tristeza, cambios en los patrones de sueño, ganas de hacerte daño o sentimientos negativos sobre ti o tu vida, consulta a tu médico para que te aconseje iniciar un tratamiento.
El embarazo puede causar algunos síntomas desagradables, tales como:
Si fumas, bebes o usas drogas durante el embarazo, tú y tu bebé corren el riesgo de tener problemas graves.
Definitivamente el consumo de alcohol durante el embarazo no es apropiado. Si consumes bebidas alcohólicas, puedes provocar daño al feto en desarrollo y el bebé corre el riesgo de sufrir defectos de nacimiento y problemas mentales.
Fumar durante el embarazo está asociado con algunos de los siguientes riesgos: muerte fetal (el bebé muere en el útero), bajo peso al nacer (lo que aumenta la probabilidad de que el bebé desarrolle problemas de salud), parto prematuro (bebés nacidos antes de las 37 semanas) y síndrome de muerte infantil súbita (muerte de la cuna).
Esta muerte súbita e inexplicable de un bebé ocurre en menores de un año de edad).
El uso de drogas ilícitas como la cocaína o la marihuana durante el embarazo puede provocar un aborto espontáneo, un parto prematuro y otros problemas de salud. Además, los bebés pueden ser naturalmente adictos a ciertas drogas.
Si tienes problemas para dejar de fumar, beber o usar drogas, pide ayuda a tu médico. Consulta a tu médico antes de tomar cualquier medicamento durante el embarazo. Esto incluye medicamentos de venta libre, suplementos herbales preparados y vitaminas.
Habla con tu médico sobre el sexo durante el embarazo. Si tu médico te permite tener relaciones sexuales durante el embarazo, podría ser recomendable usar un condón para evitar enfermedades de transmisión sexual (ETS).
Debido a que algunas ETS pueden causar ceguera, neumonía o meningitis en los recién nacidos, es importante que tú y tu bebé se protejan.
Uno de los puntos cruciales que debes conocer perfectamente durante el embarazo es la forma de alimentarte, lo cual es algo que determinará en gran parte la evolución de tu embarazo para el correcto desarollo de tu bebé, así como para disminuir el riesgo de presentar complicaciones propias del embarazo.
Tu alimentación es crucial para ti y tu bebé
Muchas mujeres se preocupan por la apariencia de su cuerpo y temen aumentar de peso durante el embarazo. No es aconsejable que en el embarazo reduzcas la cantidad de calorías o te pongas a dieta porque en el embarazo estás alimentando a dos personas. Tanto tú como tu bebé necesitan ciertos nutrientes para que tu bebé crezca adecuadamente.
Si comes una variedad de alimentos saludables, tomas suficiente agua y reduces la comida chatarra con alto contenido de grasas, ayudará a que tu bebé crezca sano.
Los médicos generalmente recomiendan agregar unas 300 calorías al día a tu dieta para proporcionar un crecimiento adecuado para tu bebé. Dependiendo de tu peso antes del embarazo, debes aumentar de 11 a 15 kg (25 a 35 lb) durante el embarazo, principalmente en los últimos 6 meses. Tu médico te dará los consejos pertinentes en función de cada caso en particular.
Debes comer más fibra (de 25 a 30 gramos por día) y beber suficiente agua puede ayudar a prevenir problemas comunes como el estreñimiento. Las frutas, verduras, los panes integrales, los cereales o los panecillos integrales son buenas fuentes de fibra.
También es deseable limitar el consumo de edulcorantes artificiales y cafeína.
El ejercicio durante el embarazo es bueno para su salud cuando no tienes complicaciones en el embarazo y eliges las actividades apropiadas. Los médicos suelen recomendar actividades de bajo impacto, como caminar, nadar y hacer yoga.
En general, debes evitar los deportes de contacto y los ejercicios cardiovasculares de alta intensidad porque conllevan un mayor riesgo de lesiones.
Tampoco se recomienda realizar trabajos que impliquen levantamiento de pesas para mujeres durante el embarazo. Si tienes preguntas sobre qué ejercicio es seguro para ti y tu bebé, habla con tu médico.
Es importante descansar lo suficiente durante el embarazo. Durante los primeros meses del embarazo, intenta adquirir el hábito de dormir de lado.
Acostarse de lado con las rodillas dobladas será la posición más cómoda a medida que avance el embarazo. Favorecerá la función del corazón porque el peso del bebé no ejercerá presión sobre las venas que llevan la sangre de vuelta al corazón desde los pies y las piernas.
Algunos médicos recomiendan específicamente que las mujeres embarazadas duerman sobre su lado izquierdo. Dado que algunos de los principales vasos sanguíneos se encuentran en el lado derecho del abdomen, acostarse sobre el lado izquierdo ayuda a que el útero no ejerza presión sobre ellos.
A lo largo de tu embarazo, y especialmente en las últimas etapas, es probable que te despiertes con frecuencia por la noche para ir al baño. Si bien es importante beber muchos líquidos durante el embarazo, trata de beber muchos líquidos durante el día en lugar de tomarlos por la noche.
Ve al baño antes de acostarte. A medida que avanza tu embarazo, puede ser difícil encontrar una posición cómoda en la cama.
Puedes intentar colocar almohadas alrededor y debajo del estómago, la espalda o las piernas para que te sea más cómodo.
El estrés también puede afectar el sueño. Tal vez estés preocupada por la salud de tu bebé, el nacimiento o cómo asumirás el nuevo rol de madre. Todos estos sentimientos son normales, pero pueden provocar insomnio.
Habla con tu médico si tienes problemas para dormir durante el embarazo.
Nuestro cuerpo es el hogar de nuestra mente y emociones, tiene la capacidad de hacer uso de la parte intelectual para la solución de situaciones y problemas a los cuales nos enfrentamos todos los días.
En el cuerpo se almacena la información, recuerdos, emociones y energía desde el momento de nuestro nacimiento.
La OPS define a la Salud Mental como: “La Condición de la vida humana que resulta de un armonioso desarrollo intelectual, emocional y social del individuo y que se caracteriza por una conducta orientada hacia el logro de un bienestar personal y colectivo, a través de la realización de sus potencialidades y la contribución a los procesos de cambio del medio”
Dicho de otra manera, la salud mental incluye el equilibrio de nuestro bienestar emocional, psicológico y social. Influye en la forma en que pensamos, nuestro sentir y nuestro actuar en las distintas circunstancias de nuestra vida.
Está en relación con la promoción del bienestar; evitar los trastornos mentales y el adecuado tratamiento y rehabilitación de las personas que sufren dichos trastornos.
Conservar una salud mental es de suma importancia en todas nuestras etapas de la vida, desde la niñez, la adolescencia pasando hasta la adultez y terminando en la vejez.
Reconocer las características principales de una persona que está sana mentalemente es el punto de partida para poder determinar los trastornos mentales que padezcan las personas y así poder dar un seguimiento y apoyo adecuados a dichas alteraciones mentales.
A continuación menciono las características que posee una persona que mentalmente se encuentra sana:
La adolescencia es una de las etapas más divertidas del ser humano, comprende desde los 10 a los 19 años, en ella se sufen cambios físicos, emocionales y sociales muy visibles y de gran impacto.
A nivel mundial se estima que entre el 10% al 20% de los adolescentes sufren algún trastorno mental, pero desafortunadamente estos no son detectados ni tratados de manera oportuna.
La etapa del adolescente se trata de un periodo importantísimo para el desarrollo y conservación de sus hábitos sociales y emocionales cruaciales para su salud mental.
Para poder entener sobre la etapa de la tercera edad conoceremos algunas definiciones básicas
El envejecimiento es un fenómeno natural que se refiere a los cambios que ocurren a lo largo de la vida y que resultan en diferencias en la estructura y función entre las distintas generaciones.
Los familiares de las personas de la tercera edad deben saber identificar cuales son los problemas de salud a los que se enfrenta el adulto mayor y así tomar medidas preventivas para evitar posibles complicaciones tempranas.
A contianuación menciono los grupos de afecciones que sufren las personas de la tercera edad:
El envejecimiento tiene efectos psicológicos. Además de admitir que estamos envejeciendo, este puede ser uno de los impactos más profundos que jamás hayamos experimentado.
Una vez que cruzamos la línea invisible de los 65, nuestros años se convierten en puntos de referencia para el resto del juego de la vida. Ya no somos “mayores de edad” sino que somos clasificados como “mayores“.
La forma en que respondemos a las presiones del cambio y el cambio de identidad que enfrentamos depende de nuestro carácter fundamental. A continuación, se presentan los 3 tipos básicos de personalidad que se han identificado.
Esto puede ser una simplificación excesiva, pero ilustra efectivamente la personalidad:
Cambios fisiológicos: Todos los sistemas del cuerpo se ven afectados y el sistema de reparación se ralentiza. El proceso de envejecimiento ocurre a diferentes ritmos en diferentes individuos.
La pérdida de grasa subcutánea y la reducción de la elasticidad de la piel pueden provocar la aparición de arrugas, flacidez y pérdida de los contornos corporales suaves. Articulaciones rígidas y dolorosas, los rangos de movimiento se ven limitados.
El aumento de tejido fibroso en la pared torácica y los pulmones restringe los movimientos respiratorios y consume menos oxígeno. Las personas mayores tienen más probabilidades de desarrollar infecciones del tracto respiratorio inferior, mientras que las personas más jóvenes tienen más probabilidades de desarrollar infecciones del tracto respiratorio superior.
La caries dental y la pérdida de dientes pueden afectar la facilidad y el placer de comer. El encogimiento de las papilas gustativas significa que la comida tiende a ser insípida y los cuidadores deben tener esto en cuenta.
La falta de ejercicio (que irrita el intestino) y la producción reducida de jugos digestivos pueden provocar cambios en la digestión. Es probable que el resultado sea estreñimiento e indigestión.
Los problemas económicos pueden hacer que los adultos mayores consuman demasiados carbohidratos baratos en lugar de proteínas y alimentos de origen vegetal más costosos, lo que puede exacerbar el problema y generar problemas como la reducción de la ingesta de vitaminas y una mayor susceptibilidad a la anemia y las infecciones.
La capacidad intelectual alcanza su punto máximo y puede permanecer conservada con poco o ningún deterioro. Las personas con un coeficiente intelectual inusualmente alto parecen sufrir el menor declive.
La educación y la estimulación también parecen desempeñar un papel en el mantenimiento de la capacidad intelectual.
Dos enfermedades del envejecimiento que causan deterioro cognitivo son el Alzheimer y el síndrome de Pick. En el síndrome de Pick, hay una incapacidad para concentrarse y aprender, y las respuestas emocionales están deterioradas.
En la degeneración física lenta y progresiva de las células del sistema nervioso, la genética parece ser un factor importante. Por lo general, comienza después de los 40 años (pero puede ocurrir a partir de los 20).
Degeneración de todas las regiones de la corteza, especialmente de los lóbulos frontal y temporal. Las células afectadas en realidad mueren. Los primeros síntomas se asemejan a las neurosis: ansiedad, depresión, inquietud, dificultad para dormir.
Deterioro paulatino de la capacidad intelectual (el déficit de memoria es el más notorio y evidente). La masa total del cerebro disminuye y los ventrículos se agrandan. No existe un tratamiento definitivo.
Enfermedad degenerativa rara. Similar al Alzheimer en inicio, síntomas y de posible origen genético. Sin embargo, afecta áreas restringidas del cerebro, especialmente las áreas del lóbulo frontal que provocan la pérdida de la influencia normal.
Las personas mayores tienen las mismas necesidades que las personas más jóvenes: sin embargo, las personas mayores tienden a tener menos recursos para satisfacer estas necesidades. Las familias y los cuidadores suelen ignorar su necesidad de interacción social.
Las familias deben hacer tiempo para visitar a los miembros mayores e invitarlos a sus hogares. Las personas mayores disfrutan visitar a sus hijos y conectarse con ellos a través de juegos e historias.
Algunos adultos mayores desconocen sus derechos de salud. La familia y los amigos deben tomarse el tiempo para explicar esto. Algunas personas mayores son demasiado orgullosas para reclamar sus derechos y este problema debe abordarse de la mejor manera.
Lo mejor es dar a las personas mayores tantas opciones como sea posible en términos de arreglos de vivienda, vida social y estilo de vida.
Los cuidadores necesitan autoanalizar sus propias actitudes hacia el envejecimiento y la muerte. La actitud negativa del cuidador es detectada por los adultos mayores y les puede esto puede provocar que expresen emociones negativas como el miedo o la ira.
Si la persona que cuida al adulto mayor logra transmitirle una actitud positiva, es menos probable que esa persona de la tercera edad muera con sentimientos de aislamiento y dolor.
“Invierte en tu alimentación ahora y no inviertas en medicinas en el futuro”
